La idea es muy sencilla: consolidar el peón de “e5” y desarrolla una pieza. Esto da flexibilidad para enrocar en ambos sentidos y dependiendo de ello el segundo jugador trazará sus planes.

Las blancas básicamente pueden intentar planes tranquilos como en la partida principal de este trabajo, Petrosian vs Carlsen de 2016, donde las blancas no obtuvieron nada en la apertura y poco a poco el entonces Campeón del Mundo incrementó su ventaja hasta obtener buena ventaja.

Otras ideas las podemos observar en la partida Borghi – van Riemsdijk de 1990, donde el blanco rompió muy temprano en e5 y el MI brasileño defendió muy bien, pasando al contraataque y logrando la victoria. Sin embargo este plan de apertura del centro es para estudiarlo detenidamente.

Estamos seguros que la idea de Gligoric, es una línea sólida y lista para lanzar peligrosos contragolpes sobre la posición blanca. No por nada entre sus seguidores tenemos al N° 1 del mundo, el noruego Magnus Carlsen.

Un trabajo a fondo sobre una variante que puede cobrar vigencia en los próximos años.